Además de remarcar la continuidad del reclamo por la denuncia de irregularidades en la elección para Secretario General,
se vivió una jornada de diálogo y fraternidad entre los dirigentes de la agrupación en el auditorio de ADIF.
Leonardo Salom y Marina Pérez encabezaron el encuentro, y contaron también cómo fueron sus primeros pasos en el rol de Delegado.
“Cada uno tiene su estilo, acorde a su personalidad y trayectoria. Hay algunos que somos… insistentes, cuando algunos
gerentes de Recursos Humanos nos ven se escapan”, bromeó Marina Pérez, que definió a Salom como “guerrero” por
tener un tono más combativo.
Por su parte, Leonardo -junto a otros referentes como Walter Alegretti y Diego Amigo- relató sus vivencias y destacó
además el rol del Delegado en la vida interna del gremio: “no es casualidad que la ley de trabajo le de al delegado
el mayor protagonismo y la centralidad de la actividad sindical”, y explicó que “si la dirigencia nacional firma un
convenio, no se puede homologar sin la firma del delegado”, tras lo cual agregó “tampoco es casualidad que le asignen
la mayor protección legal, con un año de plazo desde que deja su rol”, considerando que “eso se da porque son la primera
línea. Negocian directamente con la persona que los contrató”.
Asimismo, Salom hizo referencia al rol grupal de los que darán su primer paso como representantes gremiales:
“el delegado es el compañero que conocemos y vemos todos los días. Los van a volver locos con pedidos, y van a
tener mucho estrés, pero cuando puedan resolver un problema, una necesidad de un trabajador o trabajadora van a
dormir mejor que nunca y van a notar que vale la pena todo ese esfuerzo, porque es una tarea muy gratificante”.
Posteriormente, los más de cien participantes -que llegaron de seccionales de distintos puntos del país- aprovecharon para
hacer consultas y elevar propuestas.